En forma intencional aparta tiempo para orar y leer la Biblia. Intenta leer un capítulo de Proverbios cada día (hay 31 capítulos: la provisión para un mes) o leer un capítulo de los Evangelios (Mateo, Marcos, Lucas y Juan). Cuando lo hagas, sumérgete en el amor y las promesas que Dios tiene para ti. Esto te hará crecer más en tu caminar con Él.